viernes, enero 22, 2016

Otra vez. La noche.

La noche se me hace inmensa
espesa.
Confusa y deficiente.
Los sentidos se alertan, se alteran.
Me muevo lento y con disimulo
para mantener el aliento.
Mas allá de todo
esta la noche profunda, bien profunda
negra, completa, desmesurada,
Impone su ritmo
me asfixia,
me absorbe en toda su exageración
entre movimientos e imágenes que no logro definir
y caigo en un profundo vacío que aturde.
Estallan en mis pupilas cansadas
las luces y contraluces como danzas únicas irrepetibles
decodifico secuencias de planos superpuestos
al amparo de las voces que susurran los vientos.
La noche me traga.

                Desaparezco por completo.

sábado, agosto 01, 2015

El oficio de la palabra
se reúne en una red de miradas
que no se ven, pero
que sostiene al mundo para no dejarlo caer...
Se manifiesta en forma de huella, de voz.
Mas allá de la pequeña ternura de designar esto o aquello
el oficio de la palabra es un comprometido acto de amor
que crea resistencia
para comprobar que existimos.

sábado, abril 18, 2015

Palabras de un otoño tardio

Escribo sin saber de que lado tiran las palabras.
Se filtran una tras otra. Sin vacilación. 
Exigen decorosas alguna respuesta...
Lo compruebo en el solemne ocaso de la noche en el mundo...
Cuando me sumerjo en el desaliento que desafía la herida,
como si fuese tan fácil escribir.
Las palabras se asocian presurosas 
para darle sentido
al temor que provoca lo incierto,
invocan resolutas la contracción del ultimo suspiro.
La voz imparable que se refugia en el silencio
y se estaciona a un costado del corazón...

martes, diciembre 16, 2014

Diarios. De diciembres.

Como tengo mala memoria y se me escapan muchas cosas, entonces escribo.
Escribo lo que veo, escucho, siento, lo que pienso y lo que piensan e incluso lo que me dicen. Es como si acumulará un sin fin de historias en forma de marionetas apasionadas, que yo solo puedo mover al compás de los sentimientos.
Afuera es de noche, subo a mi terraza, la recorro con mi mirada, soy el único que conoce todos los secretos. Hay una mesa, casi, al aire libre, plantas y flores por crecer. Un libro abierto. Siempre. Y yo escribo soy feliz. Tambien lloro...
Extraño a muchos amigos que están cerca... que están lejos. Tomo aire y cierro los ojos los veo sonreir.
Y en un momento dado, suelto el lapiz, comienzo aletear con suavidad y siento que me largo a volar. Y vuelo alto, altísimo.

lunes, noviembre 10, 2014

Diarios de noviembre por la noche: Literatura.

Obstinado y voluntarioso me aferro sin mas a una profesión que no es tal, para la que quizás no nací y en la que hasta la fecha no he dado ni las mas mínima prueba de capacidad.
De todos modos, como leí alguna vez por ahí, me protejo, afirmando que en la literatura no es necesario presentar pruebas.
La literatura esta ahí, siempre. Al alcance de todos.
Y el tiempo no pasa sino que alimenta.
Se puede sentir, palpar. Oler. Se vive. Te transforma.
Está a la vista de todos nosotros en toda su dimensión, abrigando todo desamparo.
Es un simple (o no tanto) acto de observación pero con el profundo
re ordenamiento de todos los sentidos posibles en función de la cosa observable.
Y allí es donde la materialidad de la cosa se transforma en la vibración de la palabra. Ahí radica toda su maravilla.
La literatura es oxígeno. Es ese grito que comienza a trepar por todas las vísceras.
Su fluir es un vaivén eficaz de todo lo que va sucediendo.
El posible escuchar el temblor que provoca la emoción, el chisporrotear de letras tras letras. Como un flujo de información imparable.
La secuencia se repite firme y constante. La obra se construye en esa ruidosa soledad.
Y es en ella, donde, con todas mis dificultades, más a gusto me siento...

domingo, agosto 31, 2014

Al margen.
Ojos sin limites.
Sin tilde. De corazón anarquista.
Noble. Irreverente.
Agónico, paredón y después.
Siempre hay mañana.
Mueca de otro mundo, casi mejor.
De barrios bajos y primaveras.
La vida raspa, siempre;
hasta el ultimo escondite,
de la memoria.
Sonrisa al filo.
Declaración manifiesta.
Avanzar,
entre silencios ausentes.
Ultimo principio. De este nuevo final.

domingo, julio 20, 2014

Supervivencia

Entre la angustia y la alegría
que provoca vivir,
escribo.
Escribo poesía
como supervivencia.
Entre voces de intemperie
en un acto. Sublime.
Noble y desinteresado.Entre las miradas silenciosas...
Como promesa. 
            Como susurro.
Como evidencia. Conmovedora de vivir... 
                                       entre la angustia y la alegría...