A menudo perdemos la mirada
en el indómito horizonte,
para encontrar esa certera respuesta
que nos saque de ese pensamiento inquietante,
incesante...
ensordecedor.
Nuestra-alma es ese viejo velero
que anhela encontrar Icaria...
y allí ver,
como se esconde el sol,
y encontrar
en esa isla infinita
quién habita,
en ese recóndito cielo.
Con la excéntrica devoción,
de sentirse libre...
2 comentarios:
Simplemente hermoso
No hay nada como sentirse libre..
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