domingo, junio 07, 2009

Identidad

La encrucijada de vivir la historia.
A veces esa hoguera de establecer la duracion
de hacerse noche por los caminos secretos.
Y encontrase con el peregrino que no ya no serás...

Pero vos con esa furia ignoras el aún,
el aún de todo,
y en ese parpadear de ojos
perdes de vista lo que vendrá...

Esta el la callada voz,
de todas tus historias
el esperial de tus cenizas...
el oro ciego que llamas tus mañanas...

Cuantos retratos para antes de morir.
Cuánta ciudad de hombre en cada gesto.
Cuánta ráfaga sorda de trasmundos...

2 comentarios:

Ascaso dijo...

A veces en la vida hay que saber luchar no sólo sin miedo, sino también sin esperanza.

martin dijo...

sin lucha no hay progreso, no hay cambio posible.